Panem (theatrum) et circenses

  "Salida de los obreros de la fábrica"

                                                           a mi abuelo  *

                                                    (bajando el telón)

                                    ¿Dónde estabas entonces,

                      cuándo tanto te necesité? (EUDLF)

          Retablo barato pero caro. De distinción de clase entre quienes siempre aparentan y quienes siempre transparentan, entre las entretelas del tiempo y las velas que apaga el viento (a la contra).

Y es que así es,  es así, después de la tan cacareada y celebrada re-inaguración del Teatro Circo. A base de bases de agua, tabla, tablatura, tábula rasa para marcar las mismas lindes, para determinar idénticas mimbres.

           La aguja en el pajar nadie la encuentra y quemar el granero entero es hacer desaparecer, también, el acero. Fundir el metal, hará que no quede nada, que lo que pueda esconder el pasado sea una sombra. (A caso, su fantasma).

Donde  se forjó la juventud de nuestros abuelos, de magia y espectáculos, de cabaret y payasos, de películas de vaqueros y censurados besos... etc. Bajo la carpa del perenne Enrique Villar.

(Texto escrito, al encontronazo, a la salida de la gentes del TCM)

* A su olvido de lugares donde ha vivido, donde ha sido feliz (ó algo así) se une ese afán del "pogreso" por remodelarlo todo. De dejar la fachada, de aprovechar la nostalgia de tiempos (a priori) más seguros, menos precarios. Esa postulada postura de post-modernidad e impostura que viene a borrar las huellas, que habla desde el pasado, insultándolo. "Cambiar todo para que todo siga igual".

NOTA: como en tantos otros sitios, políticamente correctos, el protocolo de actuación de bedeles y demás personal roza lo ridículo. Formalismo en exceso que entronca ó choca con aquello de: "eso no es competencia mía" (de lo que puede derivar cierta palabra contraria).